Julio Tejera es un ejemplo emblemático para esta sección de Éxito Anónimo. Nacido en La Laguna hace 43 años, se trasladó a Barcelona en 1993 donde estudió Bellas Artes en la Autónoma de Barcelona y piano y armonía en el famoso Taller de Musics de la misma ciudad. Con 20 años de trayectoria profesional tiene a sus espaldas más de 150 grabaciones discográficas, giras con importantes músicos de España y una buena ristra de arreglos, músicas incidentales y cabeceras compuestas por él para cine, teatro y televisión. Ha compartido escenario con artistas como Richard Bona, Scott Henderson, Victor Bailey, Bill Evans o REM. Su prestigio musical es indiscutible y los artistas se lo rifan para que haga sus arreglos o los acompañen en directo. Ha trabajado con artistas canarios como Pedro Guerra, Taburiente, Sabandeños, Benito Cabrera, José Antonio Ramos, Kike Perdomo o Arístides Moreno; artistas nacionales como Revolver, Santiago Auserón, Malú, Miguel Ríos, Loquillo, Mikel Erentxun, Ella Baila Sola o José Manuel Soto; y ha compuesto cabeceras tan conocidas como las de los informativos de Antena 3 o de la serie ‘La que se avecina’. Y todavía le queda tiempo para desarrollar sus propios proyectos creativos dentro del ámbito de Jazz. Julio nos hace un hueco en medio de la gira internacional ‘Papitwo’ que está realizando como pianista y teclista de Miguel Bosé para charlar con nosotros.
– ¿Cómo fueron sus inicios en la música?
“Siempre he tenido música en casa, mi padre perteneció a grupos como Los Sabandeños en sus comienzos o Añoranza más tarde. Siempre hubo música cerca de donde respiraba uno. Y cuando llegué de Barcelona, donde estaba terminando mis estudios de Bellas Artes en la Autónoma, comencé a tocar en locales como el Búho. Por aquel entonces Taller Canario empezaba a grabar su nuevo disco y comenzaba también una gira por las Islas, esta vez ya sin Pedro Guerra Me lo propusieron y desde entonces aquí estamos.
Siguieron grabaciones y directos junto a artistas como Andrés Molina, Rogelio Botanz, Taburiente, Chiqui Pérez, Arístides Moreno… Y luego mi marcha a Madrid, grabaciones, trabajos para televisión, producciones y giras como por ejemplo las últimas de Revolver (4 años y 2 discos).
He tenido mucha suerte, ya que desde entonces empecé a trabajar con muchos músicos de Canarias y de fuera, tanto para conciertos en directo como para grabaciones. Realmente me considero un afortunado”.
– ¿Qué ha cambiado desde sus inicios en las Islas hasta hoy que trabaja en medio mundo?
“Pues, sobre todo, en valorar la sencillez. Me aburren tremendamente las competiciones. Cuando se tiene ocasión de interpretar algo, cuantas menos notas y en su sitio, mejor. Para mí lo difícil es decidir una buena melodía, cerrar una buena armonía…”
– ¿Cuáles considera que son las claves de su éxito?
“Creo que mi principal fortaleza es saber donde estoy, donde piso. Mi profesión es así también. Un día estas aquí, y otro allí. Mi salario se que también es así. Si uno se deja llevar por la ansiedad a la hora de tocar o de pensar en su futuro termina por no hacer nada al final. Llevo ya más de 20 años desde que grabé mi primer disco.”
– ¿A quién le debe lo que es hoy?
“Le debo a mi familia el tener la música como alimento en casa. Le debo a locales como el antiguo Búho en La Laguna o Cuasquías en Las Palmas y la necesidad de mejorar en cada noche que uno tocaba allí. Locales donde germinaron y crecieron infinidad de propuestas y grupos. Le debo a mis amigos músicos el camino recorrido juntos y todo lo que he aprendido”.
– ¿Qué trabajos destacaría del pasado?
“Recuerdo con cariño mi primer disco con Taller Canario en los años 90, la grabación del disco de Arístides Moreno en vivo, con sus ensayos y arreglos, con Chiqui Pérez más tarde, actuaciones con ellos, con Taburiente, o con mi amigo Rogelio Botanz por el País Vasco, con Carlos Goñi en acústico a piano, o mi primera sesión de grabación con la Orquesta Sinfónica de Bratislava… no se, son muchos”.
– ¿Y en qué anda metido ahora mismo?
“Actualmente hago música para TV, series para Tele 5 como “La que se avecina”, series de animación como Jelly Jamm que actualmente emite Clan TV en España y que se ha vendido a 150 países. También estoy trabajando en los arreglos y producción del próximo disco de Sito Morales, con colaboraciones como la de Carlos Goñi. Y además estoy de gira con Miguel Bosé por América”.
– ¿Y para el mañana?
“Acabo de montar en casa mi estudio. Quiero que se convierta en un pequeño laboratorio sonoro. Quiero que de ahí salgan cosas realmente interesantes, personales, proyectos…”
– ¿Cómo le afectan los recortes y la situación actual?
“Se ha notado, y se notará más. Lamentablemente la cultura aquí no se respeta como en otros países. Años atrás ha habido derroche, obras faraónicas que encima ahora hay que mantener su consiguiente gasto. Y sobre todo mala gestión cultural.
Como siempre hay que cargar con la ignorancia, muchas veces, de los propios gestores. Sin pensar que lo importante y lo que hay que potenciar son los creadores, ahora, en vez de mantener infraestructuras muertas y vacías, o parar proyectos infumables. ¿Qué hacemos con todos esos sarcófagos de la cultura, ahora casi sin presupuestos?
Hemos llegado a tener solo para pagar gastos en nóminas de gente que “trabaja” para no poder programar (o programar lo mínimo), por falta de presupuesto. ¿Como se llega a eso?
Un barco amarrado en puerto, pagando tripulación, eso es lo que tenemos”.
– ¿Qué opinión le merecen, en concreto, las políticas culturales en Canarias?
“La política y la cultura nunca han ido de la mano. Quizás, y lo digo abiertamente, por la falta de la misma en los políticos que gestionan el dinero que se destina a ella. Los creadores van 30 ó 50 años por delante de ellos. Conozco a muchos políticos que se sonrojarían con acciones del grupo Fluxus de los años 60. Por no decir que ni los conocerían. Están a otra cosa.
Ya ni me molesto en confiar en ellos y su capacidad. Nunca he esperado nada de ellos ni lo esperaré, están muy lejos en todos los aspectos, y como dije, a otra cosa.
Los que hacen el cambio son los artistas, no los políticos, que aplican el cambio después de que ya ha sucedido. Y eso es así siempre (menos mal que están los libros de historia y nos lo recuerdan).
En canarias existe un gran germen musical y cultural, talento del que te das cuenta cuando estás fuera y lo ves, las gentes, las ganas, la curiosidad, todo eso nos invade, también nos llegan muchas corrientes desde América, África, son nuestro pulso, diferentes y propios…”
– ¿Cuáles son los principales cambios actuales en su sector y cómo cree que va a desarrollarse en los próximos años?
“El sector industrial cambiará ya de una vez por todas, el CD/DVD/BR solo es un soporte, como lo fue el vinilo, el contenido de un cd es orgánico, los formatos cada vez lo son más, la nube o Spotify, etc, ya están ahí, solo falta cerrar bien que los beneficios sean reales y que vayan a quien tienen que ir, en este caso a los artistas.
Nos ahorraremos a las moribundas, agonizantes y vampíricas discográficas algún día, aferradas aún a su propia mentira. Los “discos” como proyectos, lugares, aplicaciones, lo que sea … Creo que por ahí va a ir la cosa. Música va a haber, la humanidad la lleva dentro desde siempre.
En cuanto a actuaciones en vivo, por lo menos en España, lo del IVA al 21% sí que es un autentico desastre, va a ser la estocada al sector, es infame”.
– ¿Cuál es su relación con Internet?
“Tengo perfiles en Twitter y Facebook, me mantengo en contacto con muchos profesionales y mantengo amistades y contactos por las redes, a parte lo uso casi enteramente de manera profesional”.
– ¿Qué consejos le daría a una persona que se inicia en la música?
“Una vez oí decir, y es una gran verdad, “el artista sabe lo que hace, pero para que merezca la pena debe saltar esa barrera y hacer lo que no sabe”.
Trabajo y curiosidad, no queda otra. Ganas y ser conscientes de que dedicarse a lo que a uno le gusta es parte de la felicidad; aprender y aprender”.
